Cuando ya no queda nada más que hacer, ver en la Televisión o no se tiene xbox 360.
29.1.09
Las muchachas de Salado.
Debo admitirlo, no siempre me enamoro. No siempre tengo sentimientos “lindos” hacia todas las muchachas que veo. No a todas les quiero regalar un labrador. Algunas, simplemente, me calientan. Voy a usar una palabra, un poco más caballera, las encuentro “atractivas”. Y eso es lo que me pasa con Scarlet Johansson (insisto que las minas ricas, no tienen nombres corrientes).
Debo seguir siendo honesto y decir que no he visto muchas películas de Scarlet. “Match Point” y una de la que ella no debe sentir mucho orgullo, tipo película adolescente. Ni siquiera he visto “Lost in translation”, así que poco tengo para juzgarla. Pero como esto no es un juicio negativo, sino un tributo a sus “atributos”, continuo.
Tengo algo con las rubias, rubias. No sé lo que es, pero creo que tiene que ver con los gustos de mi padre, expresados en mi, como una “calentura colectiva”.
Pero algo tienen, aparte es una chica típica, como la televisión. No necesitas pensar mucho, ni sufrir. No es alguien con quien me casaría, pero si tendría una aventura o que sería la secretaría con la que fantasearía, cuando esté en un matrimonio aburrido. Pero no creo que pensar así de ella es algo malo, como decía antes, es algo sencillamente humano. En el caso anterior, no engañaría a mi esposa. En el peor de los casos la despido (a la secretaria) y contrato a una señora de 60, con sobre peso. Y listo. Es una entretención y listo. Aunque no jugaría con sus sentimientos, si es que ella me amara con locura (Se puede soñar, por algo soy amo y señor de este blog).
Pero siguiendo los pasos, de la casi única película que he visto de ella, sigo continuando. Me gusta su clase, porque aunque la encuentro “atractiva”, también tiene un garbo, que la caracteriza. Si la veo en la calle, sé que es ella. Y eso, al menos, la hace especial, para este humilde servidor. Y esa mezcla, entre dama del sigo 18 y amante del siglo 21, es algo. No sé lo que es. Pero la hace especial. Y no es eso lo que queremos todos de una mujer, ¿Algo especial?.