1-Aceptaría que no soy perfecto y eso, para alguien que se ama, con locura, es muy difícil.
2. Abandonaría la más perfecta de las relaciones amorosas, chica rubia, ojos verdes, buen cuerpo, simpática, humilde, padres increíbles, con dinero, buena onda, planes de matrimonio y de vida asegurados, un perro labrador a los pies de la cama que compartiría con no mi señora, mi polola y no es mi casa, en la de sus padres. Estaríamos en el altar y sonaría el celular "Hola Roberto, soy yo. ¿Quieres pasar un fin de semana de amigos en la playa?" Sabes, le diría a mi novia, esto se terminó, lo siento, sin mirar atrás.
3- No haría nada de los 5 puntos que habría hecho en la visita de Kirsten Dunst a Chile, si es que su venida, coincide con este fin de semana especial. En el aeropuerto estaría lleno de periodistas chilenos, pero no el romántico que le escribió la carta a esta gringa, para que viniera a Chile.
4-La presidencia. Cuando en el 2040 los medios me pregunten si es que algo me hace falta, dado que obtuve 99 % de aprobación en las elecciones y yo les diría que si, una cosa, lo que me tiene escribiendo hoy. Misteriosamente habría un llamado que me diría "¿Todavía quieres ese fin de semana?" Al otro día sería nuevamente un ciudadano. Y la tiranía o las buenas intenciones de mi gobierno, a la basura.
5- Faltaría a la premiación del Novel de la humildad y genialidad universal, por coincidir con este fin de semana. Que el premio se lo donen a cualquier persona y que mi nombre no figure, más que en el corazón de esta muchacha.