¿Por qué esa necesidad intrínseca del ser humano por figurar? ¿Qué el que no es centro de mesa está mal? ¿Y si uno lo es, es por llamar la atención?
No sé de donde vendrá todo esto, quizás en el buscar el amor en otros, más que en mi mismo, pero quizás eso es demasiada filosofía. Pero ¿Qué pasaría en un mundo en que todos fuésemos famosos? ¿En que sólo unos pocos, algunas almas sean desconocidas? ¿Nos acercaríamos, nosotros, celebridades, a sacarnos fotos con ellos? ¿Se acercará Obama a Juan Perez para poder sacarse una foto con él? ¿Le pedirá Leonardo Di Caprio a Juana García el poder grabar como pela cascaras de Limón para hacerse una rica agüita de cáscara de limón? No, quizás, porque es estúpido, al igual que querer figurar.