18.6.06

¿Y si empiezo a fumar?

Voy caminando por la calle, con mi pelo recién cortado y la gente me empieza a mirar de una forma rara. Es decir, no me veían así desde hace mucho tiempo, recuerdo que la última vez fue cuando tenia 14, 15 años, ya hace bastante tiempo. ¿Será por mi pelo? La verdad es que yo encuentro bastantes estúpidos los estereotipos, pero al parecer todos los tenemos. Si hasta yo, encontrándolos estúpidos, me dejaba el pelo largo para verme desaseado, para verme como si no me importara y la verdad es que no me importa lo que la gente opine de mí y hasta hace unos momentos también pensaba lo mismo de mi propia opinión, que me daba lo miso lo que yo opinara de mi (mi conciencia), pero al parecer me importa. Mi propio Pepe Grillo que me aconseja como estoy más a la moda. Y no se trata de estar más a la moda, sino de cómo paso más inadvertido (desapercibido no, eso se refiere a no tener provisiones).
Volviendo a que la gente me vea de forma diferente y teniendo en cuenta que es por el pelo, tal vez lo pueda ocupar para yo ver las cosas de forma distinta. Si la gente me ve de forma diferente, yo debería hacer lo mismo con ellos, así tener una relación recíproca. Antes hubiese dicho de inmediato que no, porque mi forma de pensar era la mejor y yo era el ser más bacán de la Tierra. Pero ahora no me siento capacitado para decir lo mismo, al menos antes tenía moral para decirlo. Al menos ahora no me siento tan bacán, cosa que no tiene que ver con que tenga baja personalidad. Si fuese por mi personalidad, en estos momentos estaría en un rincón hablándole a una araña, la que por supuesto, no me estaría tomando en cuenta.
Pensando de esta forma, analizo el hecho de empezar a fumar, sólo por el hecho de ser más malvado, más misterioso. Hace un tiempo me había comprado un abrigo negro y lentes de sol, pero ese look en las noches veraniegas sólo me valió muchas cachetadas. Creo que Reñaca no fue el mejor lugar para realizar mi plan, con todo esto del violador y San Expedito (estos dos no creo que tengan relación). Empezar a fumar por estas razones tan banales parece infantil, pero la verdad es que nunca he tomado un cigarro, pensando que me hacen mal, cosa que es verdad. Pero cuando todos empezaron a fumar, cuando yo dije que no, todos lo hicieron para ser más cool de alguna manera. Yo no lo hice porque no me importaba lo que dijera la gente y me molestaba demasiado el humo. Aparte prefería gastarme esos 1000 pesos en 10 sobres del albún de “Dragon Ball Z” (sí, hubo tiempos hermosos en que los sobres salían 100 pesos. De hecho, una vez rompí el chanchito y con 3600 pesos complete un albún. Hoy en día me compraría el albún y un sobre con ese dinero). Pero si la gente me mira distinto, tal vez debo empezar a fumar, creo yo. La gente se me acercaría para hablar de cigarros, de que marca son, si tengo fuego o si tengo algún encendedor bacán o si puedo hacer acrobacia con el encendedor en cuestión, que ser más cool. Tal vez así dejaría de ser tan “bueno”, nunca he entendido por que me tildan de bueno, sólo porque cuando voy a un pub pido una coca cola y no estoy con un puro en la boca. ¿Por qué me tildan de bueno? Creo de sano, pero ¿Bueno? La verdad es que yo encuentro que soy muy malvado. Quizás con un cigarro en la boca cambie el estereotipo, tal vez le cambie el paradigma a la gente. Tal vez podría adjuntar a ese cigarro, una copa de vino, una chaqueta de cuero y una moto, pero ni pensar una motoneta catalítica, solar ni económica. Debe ser una moto antigua, contaminadora, gastadora y cool, obvio. Tal vez así me convierta en un ser “enamorable”. Esta claro que ahora no. O tal vez debería pensar de la siguiente forma:”No es que no me importe, es sólo que me importa un maní”. Si la gente me mira distinto, algo esperanzado es que pueda lucir malvado antes sus ojos, allá ellos. Yo ya sé que soy lo suficiente malvado. No por un cigarro en la boca, cambiaré de alguna forma. Tal vez viva menos, aunque eso es relativo. Aparte de algo tenemos que morir, eso es cierto. Mucha gente vegetariana y que no fuma muere atropellada o aplastada por un meteorito. Así que nadie me asegura una larga vida sólo porque no fumé.
¿He cambiando sólo porque me veo distinto? No lo creo, aunque tal vez inconcientemente lo hice para tratar de ver las cosas distinto, de alguna manera tenía que empezar. En el fondo era sólo pelo y según dicen todos, las apariencias no importan. Y puede que esa falacia sea cierta (¿contradicción?), pero los estereotipos sí importan. Tal vez no para mí, pero si para la gente y claramente para Pepe Grillo.